En ocasiones me habéis hecho consultas privadas de cómo hacer una sesión de música con bebés. En el blog tenéis muchas ideas. Pero si partes de cero y no sabes por dónde empezar, aquí te voy a dejar un poquito de luz.
Lo primero que has de saber
1. TU FORMACIÓN. Porque no es lo mismo ser psicólogx, educador o terapeuta que maestro de música. Así como no es lo mismo si tu formación es en musicoterapia. Llama a las cosas por su nombre.
2.DESTINATARIOS. ¿Tus sesiones van destinadas a música con bebés o con acompañantes adultos? Porque no es lo mismo hacer música con niñxs pequeñxs que hacer talleres de música con bebés y papás o mamás. Recientemente hice un post muy enfocado a la importancia del vínculo en este tipo de intervenciones.
3.ESPACIO. Dedicarse a esto es complicado si no tienes un espacio propio. Para mí sería un sueño poder lograrlo, pero mientras tanto me conformo con ir de centro a centro impartiendo mis sesiones. He hecho talleres en escuelas de música, guarderías, centros de educación especial, academias, ludotecas, librerías… Cualquier sitio es bien recibido, pero tiene que tener unas condiciones mínimas. Como por ejemplo que sea amplio (cuanto más amplio, más asistentes cabrán), con intimidad y buena sonoridad. Hay veces que puedes encontrar espacios que te ceden una parcela sin puerta o un rincón sin pared. Es dificilísimo hacer algo ahí con niñxs pequeñxs que se distraen con cualquier cosa.
Los materiales
Parece que es la parte más importante. Si tenemos o no instrumentos musicales u otros materiales para poder realizar la actividad. Pero para sorpresa de muchos, es poco importante. Si empiezas tu trabajo en una escuela de música, vas a poder beneficiarte de todos los materiales que disponen. Es decir, pequeña percusión, material de papelería, equipo de música etc Lo tendrías fácil y accesible. Solo tendrías que prepararte las actividades.
Pero si empiezas en otro tipo de espacio, los materiales los pones tú. Pero no te agobies. Ir con toda la artillería desde el principio es innecesario. Como he dicho en otras ocasiones, las familias son muy agradecidas y se quedan con lo humano de la sesión. La calidad de la actividad no depende de lo material. Mi consejo es que empieces poco a poco a acumular tu material musical.
Si eres músico y dominas un instrumento, ese podría ser tu seña de identidad. No dudes en llevarlo a todos los sitios. Un instrumento como la guitarra o piano te permitirá cantar y hacer música a la vez, es más interactivo con los participantes. Un instrumento de viento como una flauta, te limitará un poco más, pero es tan válido como cualquier otro.
La estructura de una sesión
En el caso de un grupo que ya se conoce, que lleva tiempo haciendo los talleres, una estructura podría ser básicamente así: (pincha en cada enlace para saber más)
CANCIÓN DE DESPEDIDA
Si te ha gustado el post, comenta y comparte. ¡Gracias!
Que bien explicado! Sin duda me quedo con la sensación que se llevan después de las sesiones, independientemente de la cantidad de instrumentos o la belleza del espacio…esa es la misión de la musicoterapia
Pues sí, y así espero poder transmitirlo para aquellos que empiezan ahora su andadura. Saludos compañera!